Hay quien hace de la técnica un monstruo,
hay quien adora a la cámara como si se tratase
de una diosa, ¡no!
La cámara es ese objeto que sirve para escribir.
Encuentro absurdo a un escritor capaz de adorar
su pluma o un pintor adorador de su pincel.
Lo esencial es esa cultura, casi renacentista desde
el punto de vista de la época, la vivencia del mundo,
la capacidad de escudriñar, desmenuzar. Eso es lo esencial
Margot Benacerraf