BURGOS, EDIXELA(2020)
Caracas-Venezuela, editorial abediciones, 198 páginas.
En la presente obra, la Dra. Edixela Burgos, profesora Asociado del Centro de Investigación de la Comunicación de la UCAB, analiza si el ciberactivismo en Caracas se considera como una nueva esfera del ejercicio de la ciudadanía y la participación, para lo cual mide el alcance de estas acciones en la red. Este libro fue publicado por abediciones en el año 2020 y está compuesto por cuatro partes. En la primera, se discute sobre cómo convergen sociedad y la tecnología a fin de que cristalice una cultura participativa. Se hace especial énfasis en argumentar la importancia que tiene Internet y las redes sociales para la vida social y política, fundamentalmente en lo que supone la democracia y el ejercicio político.
En la segunda, se presenta el estudio sobre el ciberactivismo y se aborda el tema de cómo influye la tecnología en la movilización social y en las prácticas políticas. Se citan a teóricos que han discernido sobre la sociedad red: Antonio Pasquali, Manuel Castells, Jesús María Aguirre, Marcelino Bisbal, Henry Jenkins, Prensky, Carlos Scolari, solo por citar algunos. En la tercera parte, la autora analiza el papel de las políticas públicas del Estado sobre los usos de Internet, además se resalta las profundas fallas en la infraestructura de telecomunicaciones, deficiencias de conectividad, además del uso de restricciones en los accesos a Internet y las redes sociales digitales.
En esta investigación se entrevistó a seis activistas que destacan por su participación política y conocimientos en el uso de las tecnologías y las redes sociales digitales: Carlos Julio Rojas; Gabriel Domínguez; Provea- Rafael Uzcátegui; Espacio Público-Carlos Correa; Redes Ayuda y Humano Derecho-Melanio Escobar y Anonymous Venezuela-Dante.
Por último, se exponen los hallazgos de la investigación sobre el activismo, la participación y el ejercicio de la ciudadanía. Estos son, a saber: 1) El ciberactivismo en Caracas es muy incipiente. No se puede aseverar que haya una movilización en las redes sociales. Ni mucho menos que hayan repercusiones en los ámbitos políticos o sociales orientadas al cambio social. 2) Nuestra propia cultura política, la forma en cómo se construye el ejercicio de la ciudadanía y la participación, no implica que en nuestro país, el ciberactivismo sea una opción para reinventar el sistema político. En especial, por la gubernamentalidad populista con sus prácticas clientelares y burocráticas que giran en torno a la cultura rentista, que limita o cercena la acción participativa y la condición de ser ciudadanos. 3) La censura que el gobierno ejerce en Internet, es la misma que países como China, Irán y Turquía emplean para vigilar y controlar a los ciberciudadanos. Subraya la profesora Burgos: “Evadir los bloqueos en Internet requiere de unas competencias tecnológicas que la mayoría de los ciudadanos no posee, estamos hablando de habilidades hacktivistas, que si bien pueden ser adquiridas a través de talleres o cursos, esto no llega a todos los venezolanos. Son consideraciones importantes a tener en cuenta si se quiere influir en la realidad sociopolítica del país.”