Fuente de la imagen: http://www.comunicacionpoliticayredessociales.eu/p/definicion-de-comunicacion-politica_8.html
AUTOR: Andrés Cañizález
En este texto se revisa lo publicado en cuatro revistas venezolanas dedicadas a la investigación y reflexión en temas de comunicación, poniendo el foco en el eje de comunicación política y delimitando el período a los años 2000-2018. Tal periodo coincide con una época de constantes conflictos en el sistema político de Venezuela, bajo el signo del chavismo, por lo que resalta el hecho de que se haya generado tal producción intelectual teniendo como telón de fondo una conflictividad latente, y en no pocos casos abierta directamente.
Abstract
This text reviews what has been published in four Venezuelan journals dedicated to research and reflection on communication issues, focusing on the axis of political communication and defining the period to the years 2000-2018. This period coincides with a time of constant conflicts in the political system of Venezuela, under the sign of Chavism, which highlights the fact that such intellectual production has been generated against a backdrop of latent conflict, and not a few open cases directly.
Comenzaremos por revisar algunas definiciones de comunicación política a partir de lo expresado por autores que pueden considerarse clásicos de los estudios de comunicación o del ámbito de las ciencias sociales.
Partimos de considerar a la comunicación como un recurso fundamental de la política y una de las categorías básicas de la democracia. Wilbur Schramm sostuvo: “los políticos tienen que ser expertos en comunicación, debido a que tienen que ofrecerse a sí mismos, dar a conocer resultados y persuadir a los votantes, y a quienes toman decisiones, de su forma de pensar”.
La comunicación política juega un rol fundamental en la acción y el funcionamiento de los sistemas políticos. Robert Meadow en su libro Politics as communication, define la comunicación política como “el intercambio de símbolos y mensajes que, con un significativo alcance, han sido compartidos por, o tienen consecuencias para, el funcionamiento del sistema político”.
David Paletz en Political Communication research asume que la comunicación política abarca toda dinámica comunicativa entre gobernantes y gobernados, siempre y cuando tal interacción conlleve significados políticos. Dan Nimmo y David Swanson mantienen que “una comunicación puede ser considerada política en virtud de las consecuencias que regulan la conducta humana bajo ciertas condiciones de conflicto” y definen a la comunicación política como “el uso estratégico de la comunicación para influir en el conocimiento público, las creencias y la acción sobre asuntos públicos”.
Finalmente, el sociólogo francés Dominique Wolton define la comunicación política como “el espacio en que se intercambian los discursos contradictorios de los tres actores que tienen legitimidad para expresarse públicamente sobre política, y que son los políticos, los periodistas y la opinión pública a través de los sondeos”.
Finalmente, el sociólogo francés Dominique Wolton define la comunicación política como “el espacio en que se intercambian los discursos contradictorios de los tres actores que tienen legitimidad para expresarse públicamente sobre política, y que son los políticos, los periodistas y la opinión pública a través de los sondeos”.
Una mirada general sobre el período
Cualquier periodización termina siendo arbitraria. En nuestro caso seleccionamos como punto de inicio el año 2000, para hacerlo coincidir además con el inicio del siglo XXI, y el cierre lo fijamos en 2018, para que fuese un año completo. Este texto lo escribimos en los primeros meses de 2019.
Tras definir el período surgió la otra interrogante. Qué material se va a analizar. Tras revisar otros textos que apuntan en esta misma dirección, enfocados en otros ámbitos de estudio, decidimos enfocarnos en cuatro publicaciones especializadas dedicadas a la investigación y reflexión en comunicación. De esa manera tomamos la revista Comunicación. Estudios venezolanos sobre comunicación, que editada por la Fundación Centro Gumilla es una publicación pionera en Venezuela y en América Latina.
Asimismo, hicimos un arqueo de las revistas académicas editadas en Venezuela del campo de estudio de la comunicación: Anuario Ininco (Universidad Central de Venezuela), Quórum Académico (Universidad del Zulia) y Temas de Comunicación (Universidad Católica Andrés Bello). No se tomó en consideración la revista Disertaciones, originalmente editada por la Universidad de los Andes, pero que en la actualidad tiene una filiación académica internacional y no es en sentido estricto una publicación hecha en Venezuela.
De nuevo, todas estas decisiones por parte del investigador terminan siendo arbitrarias. Pero solo tienen por objetivo delimitar el terreno que va a ser investigado. Con estos parámetros conviene recalcar que para este trabajo no se tomaron en consideración libros publicados en el período, tampoco figuran artículos de autores venezolanos publicados en revistas foráneas y del mismo modo están excluidas las tesis de pregrado y postgrado que se hayan realizado en este período y que estuviesen conectadas con la comunicación política.
Hechas las aclaraciones necesarias, pasamos a presentar algunos resultados generales. Para facilitar el procesamiento hemos dividido en tres categorías los artículos encontrados: ensayo, investigación empírica y arqueo documental.
La producción de artículos en las cuatro revistas venezolanas tiene fluctuaciones importantes en los diferentes años, teniendo como años pico al 2008 y 2009. Desde mi punto de vista, esta mayor producción en aquel momento fue una respuesta desde el campo académico y de la reflexión tras lo que fue un agudo año 2007 en la vida nacional.
En 2007 cesó la señal por la televisión abierta del canal RCTV, lo que desencadenó una serie de protestas del movimiento estudiantil en Venezuela. Aquel año culminó con la derrota de una reforma constitucional que entonces impulsaba Hugo Chávez con la intención de perpetuarse en el poder.
A partir de 2011 se percibe una generación de textos mucho más estable y eso puede estar relacionado con la generación de reflexiones e investigaciones en torno a lo que se entiende ya como una era política en el país: el chavismo.
La revista Comunicación. Estudios venezolanos de comunicación resalta de forma notable en el volumen de publicaciones en el período analizado. Esto se debe a dos particularidades: es una publicación trimestral, y con ello tiene una cantidad superior de ediciones; asimismo, concentra el mayor número de ensayos dada su naturaleza de una revista en la que se combina la reflexión, la ensayística, con la investigación empírica.
Quórum Académico y Temas de Comunicación cuentan con ediciones semestrales. Mientras que Anuario Ininco le hace honor a su nombre y tiene una edición anual. La periodicidad marca una diferencia importante para entender los volúmenes diferentes en la mirada comparativa de este conjunto de revistas venezolanas.
Al darle una mirada al tipo de artículos, encontramos una presencia mayoritaria de investigaciones empíricas. En varios de los casos los artículos son productos generados a partir de tesis de pregrado o postgrado, o avances de investigaciones para estudios de maestría y en menor medida doctorados.
Los ensayos, por su parte, constituyen una suerte de tradición venezolana, con raíces latinoamericanas. Son textos reflexivos a partir de la mirada analítica y propia del autor sobre un fenómeno, sin que exista detrás necesariamente una investigación previa o se le otorgue un peso a la construcción de un cuerpo amplio de bibliografía consultada.
La menor presencia de trabajos relacionados con la revisión documental refleja asimismo la falta de una práctica necesaria en Venezuela, el arqueo de documentos para elaborar un estado del arte sobre una problemática. No es un proceso usual en el país. Hay varios de estos trabajos en Comunicación. Estudios venezolanos sobre comunicación.
Debido a que la gran mayoría de los textos están firmados por solo un autor, inferimos que no existe como práctica académica el trabajo en equipo o colaborativo. No se trata de una novedad, ya que ese es un rasgo distintivo de la producción académica venezolana en los campos de las humanidades y las ciencias sociales.
Dado el volumen de artículos publicados sobre comunicación política, por la revista del Centro Gumilla, no debe extrañar que los autores con mayor volumen de publicaciones sean todos de dicha publicación trimestral, tal como queda en evidencia en la tabla 1.
Intento de periodización
Tal como hemos indicado al inicio del trabajo, establecer una periodización es un ejercicio académico para ayudar a procesar y presentar resultados, pero a fin de cuentas es también una decisión arbitraria. Reconociendo tal condición, he hecho un ejercicio para establecer períodos que han terminado siendo desiguales en el número de años que comprende cada uno, pero que responden en realidad a la coyuntura política de Venezuela en este siglo XXI y que nos parece pertinente dado el tópico que es objeto de estudio, la comunicación política.
2000-2002
Mientras que en Venezuela se registra un clima de conflictividad, creciente a partir del año 2001 y con su clímax en 2002, la mirada reflexiva y académica venezolana no se centra aún en el análisis de las transformaciones que va a desencadenar en el país la llegada de Hugo Chávez al poder.
Los artículos de ese período abordan, en líneas generales, problemáticas de América Latina, miradas sobre fenómenos como las brechas sociopolíticas en la región. La irrupción de la crisis en abril de 2002 (el “carmonazo” y el regreso de Chávez al poder) abre las puertas a otro tipo de abordajes en los que de forma incipiente se conectan tópicos de la comunicación política con la realidad-país.
2003-2007
Venezuela vive en ese período una consolidación del chavismo como poder que además de forma abierta plantea su condición hegemónica en el campo de las comunicaciones. Es un período en el que se genera mayor producción reflexiva y académica y de forma notable el acento se pone en el contexto venezolano.
Este período se caracteriza por una seguidilla de acontecimientos políticos: fracaso del golpe de Estado de abril de 2002, desgaste del paro petrolero (diciembre 2002-enero 2003), referendo revocatorio contra Chávez en el cual sale victorioso (2004), no participación electoral opositora en 2005 en elecciones legislativas, reelección de Chávez en diciembre de 2006 e implantación del modelo del socialismo del siglo XXI, cese de la señal de RCTV.
Este contexto habla de un lapso en el cual el poder del chavismo se consolida. Comienza la aparición de artículos en los que ya claramente se habla de un modelo de comunicación política en la Venezuela de esos años.
2008-2010
El cénit del chavismo es en este período. Chávez reelecto y con una visión ya claramente absolutista se apalanca en la Asamblea Nacional para cooptar al resto de poderes públicos.
El período no solo sirve para continuar analizando el modelo de comunicación política y políticas de comunicación del chavismo, sino que también coincide con la primera década de Chávez en el poder. Venezuela está lejos de conocer la crisis económica, ya que los precios del petróleo siguen siendo altos.
Al hacer balance de la primera década, desde nuestro punto de vista, no solo se dibuja lo hecho sino que comienza a proyectarse –ya en aquel momento– la constatación de que el chavismo busca perpetuarse en el poder. Se realizan retratos de tal fenómeno desde los tópicos inherentes a la comunicación política.
2010-2012
El declive biológico de Chávez trae consigo las primeras señales de una crisis económica que será devastadora en los años siguientes. Mientras el chavismo se prepara para seguir en el poder sin Chávez, las miradas académicas y reflexivas sobre la comunicación política en Venezuela analizan el nuevo mapa nacional, se entretejen textos sobre las transformaciones que se han sucedido y se le conectan con las realidades de otras latitudes.
Se ha producido un cambio sustantivo en la vida nacional y esto ha tenido como pivote la comunicación política encarnada en el propio jefe de Estado. La idea de una presidencia mediática ejercida por Hugo Chávez es signo de aquel período.
2013-2018
La muerte de Chávez y la entronización de su heredero político, Nicolás Maduro, abre una nueva línea reflexiva y analítica sobre cómo hace uso de las estrategias de comunicación política un presidente con pocas luces para el destello público.
El peso que tienen en estos años la trama comunicacional construida previamente por Chávez, teniendo como mano derecha en este terreno a Andrés Izarra, es una de las razones para explicar la supervivencia política de Maduro. Se manifiestan también dos líneas de producción, las miradas sobre nuestro pasado y las visiones comparativas con el resto de América Latina. Hay una clara necesidad de tener referentes para el contraste.
A modo de cierre
Este texto no tiene ninguna intención definitoria. En realidad, se trata de una primera aproximación. La recopilación de artículos que hemos realizado tal vez pueda ser la base para otras lecturas y aproximaciones al período analizado. Las dos primeras décadas del siglo XXI en Venezuela, bajo el chavismo, constituye sin duda un campo en el que aún caben múltiples y variadas lecturas, académicas y analíticas, bajo el enfoque de la comunicación política.
Por último quiero volver sobre el título que he utilizado para este texto y en particular para la frase “Pensar en medio de la tormenta”. Tal título lo usó Jesús Martín Barbero para una publicación suya, junto a otros autores, sobre los imaginarios de nación, en Colombia, al iniciarse el siglo XXI.
Cuando rescato este título y lo uso en este trabajo, sencillamente dejo constancia que la reflexión intelectual y el trabajo académico se ha realizado en Venezuela en medio de una verdadera tormenta, en las primeras décadas del siglo XXI. El país, la sociedad, las universidades, los centros de pensamiento, todos de una manera u otra han estado en medio de una tormenta de conflictividad política y social, de agudización de las brechas, de confrontación a veces abierta y otras soterrada.
Aun así, tenemos evidencias precisamente en este texto de cómo se ha investigado y reflexionado sobre la comunicación política, de cómo se ha escrito sobre sus diferentes tópicos. A fin de cuentas, a pesar de la tormenta se ha logrado pensar.